Sony DSC-TX9, mirada de búho

Inmersos en un inverno desapacible, con oscuridad y frío, dominado por una frecuente y pertinaz llovizna, me ha llegado una Sony DSC-TX9 para su análisis en este blog. Mal tiempo para salir a pasear, pero ideal para probar detenidamente una cámara en estas complejas condiciones, máxime cuando es candidata a convertirse en una de las «reinas de las tinieblas», no en el sentido tétrico, sino por su buen rendimiento con sensibilidades altas (luces bajas), un mérito innegable cuando hablamos de ultra compactas con sensor de tamaño muy reducido, que casi puede ver en la oscuridad como lo hace un búho.

Conservo un grato recuerdo de sus antecesoras (TX1 de agosto-2009 y TX7 de enero-2010), resultando siempre interesante ver si un nuevo modelo supera a lo ya de por si bueno… ¿conseguirá la TX9 imponer su «tuneada» tecnología sobre la TX1/TX7?. La ficha técnica indica que las mejoras son contenidas, aunque significativas en algunos apartados, por lo que la apreciación de unos fríos datos parecen dar el beneplácito a esta recién nacida, aunque una prueba más a fondo será la que ratifique la previa valoración teórica.

Cuerpo: Sobre la mesa de mi escritorio se encuentra la TX9, con ese diseño minimalista de las ultra slim de Sony, pero no exento de una elegancia y glamour que se convierte en un auténtico imán capaz de seducir a todo mortal que se digne a mirarla. El cuerpo tiene unas contenidas dimensiones (97,8×59,5×17,5 mm), con gran ligereza de peso (133 gramos, sin accesorios) a pesar de estar realizada íntegramente en metal. El frontal se caracteriza por la limpieza de formas, con una gran tapa deslizante vertical (algo dura de accionar) que protege al objetivo Carl Zeiss, al flash, al micro estéreo, y al piloto auxiliar (ayuda para el sistema de enfoque AF, e indicador del autodisparador), figurando tan sólo el nombre «Sony» y «Cyber-shot» sobre su superficie. La zona trasera está ocupada en su totalidad por la gran pantalla táctil TFT/LCD TruBlack de 3,5″ y 921,6 KP de resolución, con el 100% de cobertura real de la escena, y disponiendo de ajuste de la luminosidad.

La parte superior del cuerpo tiene el botón del encendido/apagado de la cámara (en paralelo con la tapa frontal), el del disparador, y el basculante del zoom (demasiado pequeño y de poco recorrido). En un segundo escalón hay un discreto pulsador para la reproducción de las imágenes (fotografía y vídeo) y otro para la activación del foto o vídeo en formato AVCHD (Full HD). Los dos laterales están limpios (salvo un sólido enganche para la correa de sujeción para de muñeca), mientras que la zona inferior lleva la tapa abisagrada que oculta la batería y la ranura para la tarjeta de memoria externa, el conector especial de entrada/salida de datos USB 2.0 (también HDMI), y la rosca de sujeción para el trípode. Un cautivador conjunto que en España se comercializa en los colores gris oscuro, rojo, y dorado, con un PVP oficial de 400 euros.

Es conveniente comentar detenidamente la pantalla táctil de esta cámara, pues no es sólo el único medio de encuadre y visión de las escenas e imágenes/vídeos capturados, sino que también es el centro estratégico de control de la cámara, bien con los dedos o con un puntero (stylus). Es un elemento sofisticado y muy funcional, que se ensucia bastante, aunque su limpieza no es complicada. Lo recomendable es incorporar a la pantalla un protector transparente de buena calidad, para evitar arañazos y desgastes innecesarios, a la vez que poseer una funda adecuada para proteger a la cámara y sobre todo a este vital elemento.

Al encenderse la cámara, bien con el botón superior, o deslizando la tapa frontal, se activa la luminosa y eficaz pantalla. Toda la zona central permite encuadrar o reproducir las imágenes, mientras que en los dos laterales existen iconos sensibles al tacto (y parametrizables), que son los botones virtuales de ajuste. En ella también se muestra la amplia información sobre el estado de la cámara. Se puede prescindir del puntero y «pilotar» la TX9 con un sólo dedo… así de fácil e intuitivo. Desplazarse por los menús a base de pulsar los iconos es «cosa de niños», por la coherencia de sus planteamientos, sobre todo para quienes estén habituados al manejo de los PDAs y Smartphones, los auténticos «padres» del sistema «táctil».

Objetivo: Es un zoom Carl Zeiss Vario-Tessar 4x (25-100 mm, estabilizado ópticamente con el sistema «Sony SteadyShot»), relativamente luminoso (F3,5-F4,6, cierre máximo de F10), de tipo «periscopio» (interno en el cuerpo de la cámara, no emergente), compuesto por 12 elementos en 10 grupos (4 de ellos del tipo asférico), con un macro en gran angular desde 1 cm óptico real, y desde 50 cm a infinito en modo normal, cuyo funcionamiento es muy ágil y silencioso. Sólo dispone de enfoque AF (TTL, por detección de contraste), que puede ajustarse en modo matricial (9 puntos), central, o puntual, y de manera táctil elegir el punto de enfoque/exposición en cualquier zona de la pantalla. La calidad óptica es magnífica, sin apreciables distorsiones en todo su rango de distancias focales, aunque ha de tenerse en cuenta la amplitud del gran angular (25 mm), y las complicaciones a la hora de componer las imágenes, especialmente en sus extremos. Los desenfoques selectivos son efectistas y de gran belleza, propias de un objetivo de la calidad de Carl Zeiss.

Sensor/Electrónica: El sensor es un Sony CMOS Exmor R, de 1/2,3″ (con ganancia de 2 puntos EV sobre los sensores convencionales), con una resolución real máxima de 12 MP (4000×3000 píxeles, en formato 4:3), y una densidad de 43 MP/cm2. El eficaz procesador Bionz es el responsable del optimizado control electrónico de la máquina. Lleva los siguiente modos de funcionamiento: «iA» (Automático Inteligente, o Inteligencia Artificial), «iA+» (Automático Inteligente Superior, más avanzado que la opción anterior),»EASY» (Automático, toma fácil), «P» (Programado), «Barrido Panorámico» («Sweep Panorama»), «Modo Película» (Vídeo/AVCHD), «Desenfoque del Fondo» (proceso especial para desenfocar los fondos de la imagen), «SCN» (16 programas especiales), y «Toma 3D» («Barrido Panorámico 3D» y «Barrido Múltiples Ángulos»). Además de la detección facial, existe otra de control de sonrisas (3 posiciones), e incluso avisa también sobre el parpadeo de los ojos de la persona a retratar.

Magnífico es el modo de «Barrido Panorámico», permitiendo imágenes panorámicas en horizontal o en vertical de gran calidad, simplemente realizando un barrido en la dirección marcada por la cámara, y por el tiempo que ella delimita, con una sencillez total en el proceso, aunque no permite usar el zoom durante el proceso. Importante es el efecto del modo «Desenfoque de Fondos», con unos desenfoques selectivos realmente notables, aunque con ciertas limitaciones en cuanto a distancias de enfoque. Esta cámara no dispone de filtros para capturar imágenes o vídeos en monocromo, o con variaciones de color sobre el predefinido por la marca para este modelo, algo que los fotógrafos más creativos echarán en falta. El rango de velocidades de obturación va de 1/1600 a 2 segundos. El balance de blancos dispone de modo automático, además de 8 posiciones manuales. La exposición puede ser matricial, ponderada central, y puntual/spot. La compensación EV es de +/- 2 EV, con pasos de 1/3 EV. En ráfagas permite hasta 10 fps (máximo de 10 imágenes consecutivas). El rango de sensibilidades va desde los 125 ISO hasta los 3200 ISO, con los siguientes pasos ISO: Automático, 125, 200, 400, 800, 1600, y 3200.

Grabación: Las imágenes se graban exclusivamente en formato JPEG (4:3, y 16:9), con 6 tamaños en total. La DSC-TX9 dispone de una memoria interna de 32 MB, con ranura adicional para las tarjetas MS Duo (MS Duo, MS Duo Pro, o MS Duo Pro-HG), exclusivas de la marca, pero que es compatible también para las más estandarizadas SD/SDHC/SDXC. Se puede grabar sonido, y vídeo con sonido (estéreo) en Full HD (hasta 1920×1080 píxeles, a 50fps, y 17 MBps), incluso en 3D, en formato AVCHD, permitiendo el uso del zoom óptico durante la filmación (muy de agradecer). Se puede grabar el vídeo en 2D o 3D (con reproducción en dispositivos con pantalla de tecnología 3D). Hay posibilidad de realizar algunas funciones de edición de las imágenes, tras ser grabadas, incluso con determinados toques pictóricos, todo ello muy fácil e intuitivo de hacer.

(200 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

Alimentación: La batería no es muy potente (NP-BD1 recargable de litio, de 3,6 voltios y 630 mAh), con una autonomía para 230 imágenes o 115 minutos de grabación de vídeo (según normas de la CIPA), aunque la gestión energética de Sony es bastante eficaz.

(400 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

Flash: La unidad integrada tiene un magnífico rendimiento (incluso en plena oscuridad), con 4 posiciones de ajuste (Automático, Forzado, Sincronización Lenta, y/o Desactivado), con reducción de los «ojos rojos», y una cobertura de 0,08 a 3,8 metros en gran angular (de 0,5 a 3,1 metros en tele) en modo automático.

(320 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

Conclusión: La TX9 impresiona por el rendimiento del nuevo sensor CMOS Xmor R aunado con toda la electrónica de la cámara, ya que a 400/800 ISO es imperceptible el ruido en la imagen, incluso en zonas densas u oscuras. A 1600 ISO es apreciable en estas zonas más conflictivas, aunque el resultado sigue siendo muy válido. A 3200 ISO ya se generaliza el ruido en la imagen, pero las fotografías capturadas son aceptables (y más que aceptables con luz ambiental adecuada), todo ello sin un significativo procesamiento agresivo de las imágenes resultantes, ni grandes alteraciones de la gama tonal a cualquier sensibilidad ISO. Sony ha marcado diferencias con el CMOS Xmor R, junto a su excelente procesador Bionz, y por supuesto… combinado todo esto con una óptica Carl Zeiss de gran calidad (elemento vital en la calidad de los resultados), con un sistema integrado de estabilización de imagen de buena efectividad, todo un matrimonio bien avenido. Posiblemente, si este mismo sensor hubiera tenido 8 o 10 MP, en lugar de 12 MP, el comportamiento hubiera sido mejor aún, que ya es decir.

(400 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

Estamos ante una evolución positiva de su antecesora, la TX7, con una calidad de imagen magnífica, con mejora apreciable con las luces artificiales respecto a modelos precedentes de la marca, y un tratamiento del color muy bueno y fiel a la realidad, tema que se aprecia especialmente con el tono rojo (el «coco» de la fotografía digital). El sistema integral de estabilización de imagen (uno óptico -Sony SteadyShot- y otro digital) se muestra muy eficaz en general, por no decir asombroso, ya que en su modalidad «Anti Movimiento» dispara una corta ráfaga de disparos (sin flash) procesando una imagen única y estable de óptima calidad. El enfoque es rápido y preciso, sobre todo ajustado en modo puntual (seleccionable en cualquier zona de la pantalla, de forma táctil), así como también en la exposición. Sony mantiene una incesante actividad de innovación tecnológica, lo que representa un avance tangible en el mundo de la fotografía digital. El impecable diseño y realización de este modelo va en paralelo con sus prestaciones/resultados, aunque el PVP de 400 euros es algo elevado, por elevada que sea su tecnología. No es un producto perfecto, con algunas ligeras mejoras a realizar, pero se acerca bastante a esta cualidad etérea, máxime si la marca incorporase algunas funciones creativas más en la línea de lo que requiere el fotógrafo avanzado, complaciendo de esta forma a un amplio segmento del mercado, aquel que desea llevar en el bolsillo un polivalente cámara de alta calidad, con suma discreción de trabajo. Dentro del segmento de máquinas ultra compactas, además con óptica de tipo «periscopio», la TX9 es por ahora la opción más recomendable.

Ver fotografías en:
– Sony DSC-TX9 (1)

– Sony DSC-TX9 (2)

(800 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(400 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(800 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(160 ISO, toma panorámica, pinchar en la imagen para ampliarla)

(400 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(800 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(1600 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

(3200 ISO, pinchar en la imagen para ampliarla)

Juan Carlos Martin Martin (juancm.martin@telefonica.net)

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